Nuestras ideas

  • La ciencia es un motor del desarrollo y de la innovación. La investigación es el sustento de cualquier nación desarrollada que aspire a mejorar la calidad  vida, el avance tecnológico y el bienestar social y económico de sus ciudadanos.
  • La apuesta por una sociedad del conocimiento es apostar por un futuro de prosperidad. El apoyo económico de las instituciones y organismos públicos es vital para impulsar el trabajo de los investigadores, mantener las líneas y proyectos en curso y garantizar el sostenimiento y la renovación del Personal Investigador en España. Por eso, en tiempos de crisis, la inversión en I+D+i debería ser mayor que nunca. A su vez, la investigación devuelve a la sociedad esta inversión en forma de avances y mejoras.
  • La investigación precisa unas condiciones laborales dignas. Consideramos que es necesario que los jóvenes investigadores desempeñen su labor con la misma estabilidad y condiciones que en cualquier otro ámbito profesional. Así podría evitarse que los investigadores se enfrenten a carreras científicas precarias y a situaciones laborales que impiden el desarrollo del talento de nuestros jóvenes.
  • La mejora del estatus del investigador evitaría la “fuga de cerebros”. Muchos de estos jóvenes con talento acaban por abandonar el país en busca de mejores condiciones laborales. Esto supone que la inversión que el Estado ha hecho en la educación de sus ciudadanos reporte beneficios a otras regiones, que acogen al investigador formado y con cualidades, le ofrecen una mejor situación profesional y, a cambio, se benefician del resultado de su trabajo. Las instituciones públicas deberían ofrecer el entorno adecuado para que la investigación revierta en casa.
  • El conocimiento es universal. Como parte del proceso de formación de un investigador, y en un sistema donde el tejido de I+D+i nacional es estable, la salida de nuestros investigadores al extranjero debería resultar en un periodo de crecimiento profesional con posibilidad de retorno, trayendo de vuelta consigo todo lo aprendido fuera. Del mismo modo, atraer investigadores de otros países al sistema investigador español debe resultar en el fomento de la diversidad y el enriquecimiento de la calidad investigadora del país.
  • La investigación requiere de una renovación generacional. Los investigadores consolidados que en la actualidad desarrollan su labor tendrán, tarde o temprano, que dejar sus puestos de trabajo. El devenir de la vida así lo marca. Para asegurar la continuidad de la investigación, es preciso que llegado el punto haya un relevo generacional y que esas actividades de trabajo sean llevadas por investigadores nuevos. Si un investigador consolidado joven abandona su carrera investigadora por falta de opciones en su continuidad, no sólo se perderán líneas de investigación de larga trayectoria, sino que no se generarán ideas nuevas. Si no se potencia la regeneración del tejido investigador, la investigación y el avance acabarán también por morir.
  • El intercambio y la comunicación entre investigadores impulsa el avance de la ciencia. Consideramos que la unión y el diálogo entre investigadores de distintos perfiles y áreas de conocimiento es altamente beneficioso para el crecimiento científico. Uno de nuestros cometidos es, pues, proporcionar un espacio de participación multidisciplinar para que el trabajo particular se enriquezca con las aportaciones de todos los colaboradores.
  • La finalidad de todo proceso investigador es la difusión, tanto a la comunidad científica como a la sociedad en general. Promover y difundir la ciencia a toda la población constituye un pilar básico de nuestra acción asociativa en la medida en que, haciendo partícipes a todos los ciudadanos de los avances de la investigación, conseguiremos que sea considerada un valor indispensable de una sociedad avanzada. Por tanto, consideramos que la difusión de la investigación es una obligación básica de todo investigador.
  • Un colectivo asociado y organizado logra mayor fuerza y participación. El ejercicio del derecho constitucional de asociación nos permite transformar nuestro entorno para hacerlo más democrático y defender nuestros derechos como jóvenes investigadores, fomentando así una ciudadanía activa, participativa y crítica.
  • El espíritu crítico y de discusión nos hace avanzar y mejorar. Una visión abierta, crítica, constructiva y reivindicativa del entorno que nos rodea es la base sobre la que se sustenta JINTE como método de protesta ante las injusticias en el mundo de la investigación y como herramienta para la mejora contínua.

sin ciencia no hay futuro